Samsung hizo oficial ayer los nuevos Samsung Galaxy Mega, dos phablets
que dan un paso más en cuanto a tamaño de pantalla se refiere, llegando a
la casi aberrante cantidad de 6’3 pulgadas en el caso del modelo tope
de gama. Si bien estos dos son casos excepcionales, lo cierto es que el Samsung Galaxy S4 monta una pantalla de 5 pulgadas y éste sí es un competidor directo de Apple, como lo es el HTC One y sus 4’7 pulgadas o el Nokia Lumia
920 y sus 4’5 pulgadas. Incluso el recién estrenado modelo de
Blackberry, la nueva Z10, cuenta con una pantalla más grande que la del iPhone 5.
Por tanto, no se puede negar que la tendencia en el mercado actual es
disputarse por ver quién la tiene más grande y los nuevos Galaxy Mega
son un claro ejemplo de ello y un posible iPhone de 5 pulgadas podría competir con aquellos que buscan pantallas muy grandes.
Apple siempre ha tratado de poner cordura en el mercado con respecto al
tamaño de las pantallas y ha decidido anteponer la usabilidad del
producto ante la tendencia a construir pantallas más y más grandes. Pero
llegados a este punto en el que parece que Apple está perdiendo fuelle
en el mercado y, sobretodo, interés entre los early adopters surge la
pregunta, ¿Necesita Apple lanzar un iPhone de 5 pulgadas?.
El mercado manda
El mercado está enviando un mensaje claro a Apple: la gente pide
smartphones más grandes. El auge de los terminales de alta gama en Android
se puede traducir en que la gente quiere pantallas más grandes y
procesadores potentes, frente a smartphones optimizados y en los que la
usabilidad prima. Muchos dirán que es una cuestión de marketing, sí.
Pero el marketing vende y es de las ventas de lo que viven las empresas.
Por tanto, sería tentador para Apple contraatacar con la misma moneda y
presentar un iPhone de 5 pulgadas.
Apple ya se dejó llevar con la presentación del iPhone 5 lanzó un iPhone 5
más grande, llegando hasta las 4 pulgadas. Pero fue un salto
conservador, que le permitió seguir siendo fiel a su filosofía de poder
controlar todo tu smartphone con una sola mano. Ver un iPhone de 5
pulgadas no sólo se trataría de un cambio muy grande en la línea del
producto, si no que rompería con uno de los argumentos de Apple para
defender las pantallas del iPhone: la anchura de éstas, y una pulgada
más que creciera sólo verticalmente sería simplemente descabellado,
desproporcionado y muy poco útil.
La filosofía de Apple
Para los que llevamos algún tiempo utilizando productos de los de
Cupertino sabemos qué es eso de la filosofía de Apple y muchas veces
confiamos en los estándares que defienden porque, con el paso del
tiempo, hemos visto que funcionan. Hace más de 5 años compré el que
todavía es mi MacBook y ni de lejos era el que mejor procesador tenía en
el mercado ni mayor memoria RAM. Pero funciona muy bien, lo que se
traduce en que confío en Apple para tomar determinadas decisiones a la
hora de desarrollar productos. Si Apple no presenta un iPhone de 5
pulgadas es porque no creen que sea cómodo ni útil ni añada
funcionalidades a su smartphone y, mientras muchos serán los que
buscarán en Samsung una pantalla enorme, también muchos otros se
quedarán con el próximo iPhone, porque comprenden que es el tamaño ideal para llevar en el bolsillo.
Si Apple presentara un iPhone de 5 pulgadas, probablemente arañaría
muchos usuarios a otras plataformas a quién les interesa una pantalla
grande, pero también estaría dejando de ser fiel a su filosofía y con
ello, a miles de usuarios que han confiado en Apple para tener productos
que simplemente funcionen.
El precio de un iPhone de 5 pulgadas
El iPhone 5 parte de los $649, un precio que hasta la presentación del Samsung Galaxy S4 era el más alto del mercado. Teniendo en cuenta que en caso de presentar un iPhone
de 5 pulgadas seguiría actualizando los modelos de 4 pulgadas y crearía
dos líneas de productos, ¿cuál sería el precio de un supuesto iPhone de 5 pulgadas? Probablemente no bajaría de los $800, convirtiéndose en un producto casi inaccesible.
Los productos de Apple tienen un
precio elevado a cambio de tener la certeza de estar comprando un
producto funcional, con mucha vida útil y que recibirá actualizaciones
por mucho tiempo. Partiendo de esto, ¿quién estaría dispuesto a pagar
$150 más por un producto que simplemente es más grande?
Dudo mucho que veamos un iPhone de 5 pulgadas en mucho tiempo así como
dudo que éste sea el problema actual de Apple. El público responde a los
estrenos de la compañía de la manzana pero también contesta y lo más
seguro es que Apple tenga que centrarse en software, donde Android sí empieza a hacer mucho daño y Windows Phone amenaza con ser una alternativa más que interesante.