Pocos sitios quedan donde no haya alguna cámara de videovigilancia. Lo que antes era algo reservado a profesionales ahora lo encontramos en cualquier lado. Y, ¿qué tiene esto que ver con la telefonía móvil?
Pues que la Bempy GSM 3G nos permite la videovigilancia desde el móvil a través de una videollamada. Mediante un teléfono 3G podremos ver las imágenes y escuchar el sonido que esté captando la cámara, la cual incluye una batería con una autonomía de 330 horas en espera y 4 horas en videollamada.
Para mayor seguridad, se pueden limitar los teléfonos desde los que se aceptan llamadas en la cámara, de forma que nadie pueda espiarnos. El precio de la Bempy GSM 3G es de 580 euros, y también existe la opción de adquirir una versión para exteriores con un precio de 950 euros.
Via: Factoría Espía.